Thursday, August 14, 2014

Pobre


A lo largo de mi vida he tenido muchas necesidades económicas, traduciéndose en un poder adquisitivo limitado; más nunca he sido ni me he considera pobre. Pobre aquel que ha tenido que vivir como una copia de alguien más toda su vida, mientras su originalidad innata le grita constantemente que pudiera ser alguien más.
Pobre aquel que no está seguro de recibir una buena referencia ni de su propia pareja y que no se considera confiable a sí mismo. Aquel que nunca honró a sus padres en vida y sus hijos tampoco lo honran a él, por ende nunca se ha sentido totalmente amado en su vida entera, y probablemente nunca haya hecho el amor con todo su ser, hasta el punto de llegar a materializarlo.
Pobre aquel que nunca logró desprogramar todo lo que nos metieron en la cabeza desde niños, muchos ni siquiera saben que esto se puede hacer. Aquel que desconoce que el orgullo es inútil, que mientras se vive para crear una identidad el precio siempre será el dolor. Más pobre aún quien menosprecia el consejo de aquellos que llevan más tiempo en esta tierra que nosotros, aquel que, menos aún; valoraría las ideas de los jóvenes, las cuales pueden ser brillantes y que sólo necesitan acompañamiento.
Pobre es quien vive sin metas en la vida, quien no comprende que cada meta tiene un precio correspondiente y es más pobre aún quien no entiende que este precio se debe pagar, en la mayoría de los casos con sufrimiento. Pobre aquel que nunca logró elevarse y no aprendió a observar, a pensar y a planear en macro. Aquel que piensa que el dinero es un fin y un mal, aquel que no aprendió que el mismo es sólo un medio. Pobre el que nunca descubrió el poder liberador del desapego a lo material.
Pobre aquel que es manipulado por intereses de religiones y políticas, y no descubrió el secreto de la fuente eterna de vida que muchos llaman "Dios" aunque le otorguen diferentes significados, generalmente ligados a sus propios intereses. Aquel quien nunca entendió el poder liberador del ahora y no aprendió el estado de conciencia absoluta.
 Pobre aquel que piensa que los libros se pueden reemplazar por tecnología, aquel que no ejercitó su mente y viajó por el mundo por medio de ellos, ampliando su cada vez más su visión general de este mundo.
Pobre me sentiría si pensara que "posteando" en Facebook puedo cambiar los acontecimientos mundiales, el inconsciente colectivo y la política de su país.


Nunca he sido pobre por la sencilla razón de que yo soy el que soy y esa es mi mayor verdad.

Dario Morales